Excursión a Sant Cebrià de la Mora

Hola a tod@s!!!
Ayer tuvimos un día fantástico, salimos bien pronto de excursión hasta Sta. María de Palautordera a casa de unos amigos y de allí hicimos un recorrido a pie desde Collformic, pasando cerca del Pla de la Calma hasta la ermita de Sant Cebrià de la Mora (una hora de ida, y otra hora de vuelta!), uf! que agujetas tengo hoy... :D

Entre el precioso y espectacular paisaje (las montañas del Pirineo y Montserrat de fondo) y el día que nos acompañó, toda la mañana fué una gozada de compartir charla y risas con los amigos que desde navidades no habíamos vuelto a ver... La ruta era larga (sobre todo para los que no somos asiduos a las caminatas por el campo... ;) pero valió la pena, más que eso! fué un soplo de aire fresco (frío helado diría yo, por la nieve que todavía encontramos por el camino!) jijijijijijiji

Nosotros hacía algo más de un mes que no salíamos a pasar la mañana fuera de casa, a no ser cosas muy puntuales y esporádicas (pero poca cosa y poca desconexión... mi padre pide mucho de nuestro tiempo, y al mismo tiempo se merece estos momentos que le damos), pero ayer fué un día de 10...

Bien pronto (10'00h de la mañana) ya estábamos saliendo en tren a Sta. María de Palautordera, y una vez allí nos dirigimos a Collformic para empezar la ruta andando hacia el Pla de la Calma... Yo toda "chula" pensé que no cansaba esto de ir andando por un camino de tierra ;) pero es que en el desvio hacia la ermita de Sant Cebrià de la Mora dejamos el caminito y nos metimos campo a través! jijijijijijijijiji vamos, que hicimos el mismo recorrido que los jabalies de la zona!!! (lo sé, porque encontramos su rastro por todo el camino).

Mi marido se apresuró a encontrar un palo para poder hacer la ruta más llevadera con su ayuda, pero fué más un "cachondeo" que otra cosa... se le rompió y encontró otro que también se rompió, con lo que las risas estuvieron aseguradas!

He ahí la recompensa: la ermita de Sant Cebrià de la Mora, preciosa obra del ser humano rodeada del mejor paisaje que hay, montañas, un cielo limpio de nubes y azul donde los haya y bosques llenos de vida y aire puro.

Una foto de grupo para immortalizar nuestra llegada, y donde hicimos nuestro merecido descanso...

Bueno, Joan quiso immortalizar el momento jugando con este columpio que estaba en la parte delantera de la ermita! como niños, ya os digo, como niños!

Un poco de solecito y aire puramente fresco y foto mientras descansamos... perfecta la vista desde este increible lugar... 

Y como no, una foto más antes de empezar el camino de vuelta, esta vez todos colocados estratégicamente para la foto, me encanta!, y vuelta a los coches para ir a comer (llegamos a casa de mis amigos bien pasadas las cuatro de la tarde, que hambre!!!).

A todos aquellos que haceis salidas y caminatas, os recomiendo esta visita, es tan pero tan bonito el paisaje que solo con ello ya es un aliciente para hacerlo, y si el toque final es la ermita, ella es la "guinda del pastel"...

Petonets xoxo